Cómo limpiar muebles de melamina

Hoy te cuento cómo limpiar y cuidar muebles de melamina sin dramas, sin rayones... y con estilo.
Limpieza de la melamina: lo que sí y lo que no
Sí:
Un paño de microfibra ligeramente humedecido.
Jabón neutro (mejor si huele bien y no deja residuos, como estos jabones líquidos delicados).
Movimientos suaves y amorosos. Como si fuera la piel de tu cara.
No:
Nada de estropajos, ni siquiera “suaves”.
Evita productos abrasivos, alcohol o amoníaco.
No uses mucha agua. La melamina y el exceso de humedad no son amigas.
Yo siempre acabo pasando un segundo paño seco para evitar marcas de agua. Es como secar los cubiertos: se nota la diferencia.
Cómo limpiar melamina manchada
Para estas emergencias:
Grasa o alimentos : mezcla agua (¡poca!) con un poco de vinagre blanco. Aclara bien y seca rápido.
Tinta o rotuladores : una goma de borrar blanca puede obrar milagros. Si no, una gota de alcohol en bastoncillo, ¡pero sin frotar!
Cera de velas : déjala secar, raspa suavemente con una tarjeta plástica y repasa con agua tibia y jabón. Aquí te dejo una guía útil para estos casos: Cómo quitar manchas de cera de velas de un mantel .
Cómo cuidar los muebles de melamina a largo plazo
Una cosa es limpiar, otra es cuidar. Si tienes una mesa de melamina:
Protege las superficies: usa manteles individuales o bajoplatos. Protegen el área de cada comensal, donde la mesa sufre más uso.
Evita la luz directa del sol : la melamina puede decolorarse. Las cortinas ligeras son aliadas.
Evita mover cosas arrastrándolas: usa fieltros adhesivos bajo jarrones o lámparas (sí, esas lámparas "touch" que tanto adoro: ver lámparas ).
Preguntas frecuentes sobre muebles de melamina
¿Puedo usar vinagre para limpiar melamina?
Sí, diluido en agua y solo para manchas puntuales. Nunca puro.
¿Se pueden rayar fácilmente los muebles de melamina?
Sí, si usas estropajos o arrastras objetos. Trátalos con mimo.
¿La melamina aguanta humedad?
Soporta algo, pero no le gusta en exceso. Evita charcos o trapos empapados.
¿Qué hacer si se hincha un borde?
Seca bien, aplica peso y, si es grave, mejor repararlo con un canto nuevo.
Conclusión
Saber cómo limpiar y cuidar muebles de melamina es más fácil de lo que parece. Solo hay que tener un poco de paciencia y una pizca de cariño. Como todo en la vida.
¿Tienes algún truco casero infalible? Escríbeme. Siempre me encanta aprender de vosotras.
Besos y abrazos,
Marga
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